domingo, 2 de marzo de 2008

Comentario anónimo ( firmado por chapuza)

Tondi: ya sabe usted que, a pesar de nuestras diferencias de marcado corte ideológico, yo aprecio su humor y su papel de defensor de la civilización occidental, asediada por las turbas moriscas que pretenden llevarnos al abismo de su religión decadente, una de cuyas características más perniciosas y por tanto no la más grave es que tratan a las mujeres como los españoles, según se desprende de la ola de violencia sexista que golpea últimamente la península.

Yo, cuando era muy pequeñito, decidí nacer en el seno de la civilización occidental y, sin encomendarme a nadie, así lo hice. Me dije a mí mismo: ¡así estaré lejos de los bombardeos israelíes! Como ve usted, Tondi, el tiempo me ha dado la razón. Supongo que usted tomó la misma decisión, quizá incluso a una edad más temprana. Es lógico que nos sintamos orgullosos de nuestra elección y que lancemos a los cuatro vientos: ¡nosotros elegimos nacer en el Eje del Bien! Usted podría gritar simplemente: ¡yo elegí nacer en el Eje!

Sin embargo, ¿no le parece que es tener mucha cara repetir mil veces, como hizo ayer, que en Cuba "no existe un sólo negro en posición significativa dentro de la élite del poder"? Amigo mío, ¡más rigor! Para llegar a ser la espada más limpia de Occidente (noble afán el que usted tiene), hay que ser más cuidadoso con los pronunciamientos. Si no, cualquier torpedo rojo contratado por los amigos de Mordechai como yo, le pondrá en un brete.

Sepa usted, estimado Tondi, que el Consejo de Estado de la República de Cuba "sólo" cuenta entre sus miembros con once (11) negros o mestizos. Si la duda le acongoja, no tiene más que consultar la siguiente página web: http://emba.cubaminrex.cu/Default.aspx?tabid=15648. En ella podrá apreciar los abigarrados colores que lucen los componentes de uno de los órganos supremos de la Gloriosa Revolución Cubana. Observará asimismo que las fotos presentadas no han sido hechas por fotógrafos más preocupados por la imagen que por la veracidad del documento. No sé si me explico.

Falsa era también la "noticia" de la detención del estudiante cubano que usted anunció a bombo y platillo, falsos los rumores sobre la "defección" de Silvio Rodríguez y un sinfín de cosas más. Señor mío, ganas tengo de imponerle un severo castigo como, por ejemplo, leer el tomo II de El Capital, que se las trae. De momento, debería usted marcharse a hacer turismo bélico con el príncipe Harry y reflexionar, entre los silbidos de las balas, las explosiones de las granadas de mano y los estertores de los agonizantes, sobre lo horrible de sus infamias.

Por otro lado, habida cuenta de lo mucho que me río con usted, y de la grandeza de corazón y amplitud de miras que tenemos los comunistas, prefiero perdonarle. Pero no olvide la divisa de los héroes: paso corto, vista larga y mala intención.

APG: Espero que le gustara la película. Yo no soy estajanovista, pero este fin de semana es el cumpleaños 28 de la mujer que me soporta y recibimos mucha gente en la mansión, niños incluidos. Ya sabe usted que el servicio últimamente está inaguantable. ¡Tengo que pensar en todo!

Con su crítica acerba de Trudeau (que no era santo de mi devoción) olvida que introdujo el bilingüismo en la función pública canadiense, lo que permitió a los francófonos acceder a puestos cada vez más altos. Hoy en día, la parte quebequesa de la región de la Capital Nacional, plagada de funcionarios con salarios medios-altos en la que está una ciudad tan importante como Gatineau (ahora unificada con Hull, Aylmer y otras), no vota ni votará independentista. Estómagos agradecidos, APG, así es la naturaleza humana.

Trudeau era un hijo de papá al que le daba por hacerse el excéntrico y el liberado, y tenía muy mala leche, como buen cachorro de la derecha más "in". Al pobre Solana le hubiera gustado ser como él, pero le faltan redaños.

Por otro lado, a Harper se le ve el plumero desde muy lejos, con su "base" petrolera y militar. Corrupción a porrillo, uno de cuyos actos se vive en este momento: el intento de compra de un parlamentario independiente, canceroso y ya fallecido, a través de un seguro de vida de un millón de dólares. Malos tiempos para la lírica. Chrétien es un sinvergüenza muy gracioso, con más olfato que un sabueso para salirse por la tangente a tiempo. En fin, una maravilla de clase política. Democrática, eso sí.

En Quebec, la derecha federalista del PLQ es inteligente y discreta, conoce sus límites y Charest sabe latín. Además, se aprovecha bien de la situación interna de un Partido Quebequés cada vez más bobo, al que le quedan pocos años de vida. Aunque me odia cordialmente, tengo conversaciones muy animadas a menudo con uno de sus candidatos "estrella" y certifico que están en una especie de limbo pegajoso del que creo no saldrán jamás.

En cuanto al neofascista de Dumont, que representa lo más zafio de las llamadas clases medias, se le acabó el carbón. Observo vacío total en el horizonte. APG, esto se hunde. Haga como yo: cómprese una casita en el paraíso de las islas Seychelles, en donde, aunque gobierna desde hace muchos años un partido comunista, sólo va gente de alcurnia, y retírese del mundanal ruido. Están un poco caras, pero si va de mi parte quizá le hagan descuento. No le prometo nada, porque estos camaradas son muy suyos.

En otro orden de ideas, estimo que Carla está cada día más buena y Sarkozy cada día más delgado, señal inequívoca de que el hombre se da con exceso a los placeres de la carne. Lo comprendo, pero me pregunto: ¿es verdaderamente necesario ser presidente de la República para acostarse con una mujer como Carla? Desde mi modesta experiencia, no lo creo así.

Y a propósito de ciertos comentarios "liberales" de hoy y de otros días, quiero señalar que, en general, aquellos que dicen que las clases sociales son "naturales" en nombre de un seudo-darwinismo trasnochado, son los que más tendrían que callarse, porque si ellos se hubieran tenido que enfrentar en sus vidas a una verdadera competencia, quizá habrían acabado en los basureros de Sao Paulo. Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces. También se podría hacer una paráfrasis francesa, pensando en Pierre Desproges (La culture c’est comme la confiture, moins on en a, plus on l’étale), pero yo, como todos los rojos ricos, soy muy vago para ponerme a hacerla.

No hay comentarios: